Mérida, Yucatán, a 9 de febrero de 2022.- Para llevar a cabo una buena investigación en materia de Derechos Humanos es fundamental que la persona a cargo del caso tenga por convicción la defensa de estos, así como lograr la confianza de los testigos y quejosos, sostuvo Enrique Guadarrama López, ex visitador de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
En el marco de las actividades por el Centenario de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), se lleva a cabo el ciclo “La defensa de los Derechos Humanos”, en el cual Guadarrama López ofreció la conferencia “Metodología para investigar violaciones a Derechos Humanos”.
En presencia de, Renán Solís Sánchez, Abogado General de la UADY, el especialista precisó que, durante la investigación de presuntos actos violatorios de los Derechos Humanos, se debe “tener un instinto para encontrar un hilo conductor, escrudiñar todas las posibilidades para encontrar datos clave y disponibilidad para escuchar y emprender acciones para brindar apoyo”.
Asimismo, indicó que esto implica un esquema de trabajo con reglas básicas para el investigador, sin embargo, consideró que se deben adicionar elementos como: liderazgo, visión, estrategia y sensibilidad.
“Hay casos específicos en los que se requiere una indagatoria en el terreno de los hechos, investigación de campo por la trascendencia y repercusión social de los mismos, lo que amerita que se traslade un equipo de investigadores, abogados, psicólogos, médicos, criminalistas y forenses, personal que acuda al lugar de los hechos”, detalló.
Guadarrama López sostuvo que los objetivos de la investigación deben tenerse muy claros: conocer la verdad de los hechos violatorios, cómo y donde ocurrieron, las circunstancias en las que sucedieron, determinar quienes cometieron la violación, la cadena de mando y si hubo responsabilidad institucional.
Además, dijo, es necesario acreditar mediante evidencias, en caso de que así sea, las violaciones a Derechos Humanos a fin de que se impongan las sanciones o se emitan recomendaciones correspondientes.
Durante todo este proceso, continuó, no se deben prejuzgar los hechos, no rechazar ni asumir los argumentos de la autoridad y no aceptar solamente la declaración del quejoso.
“Debemos recordar que buscaremos siempre la solución del problema que presentan las víctimas o los quejosos en el menor tiempo posible, si esto se puede hacer mediante la vía de conciliación, está bien, pero en caso de que no sea así, se deben emitir las medidas en el menor tiempo posible”, concluyó.
